Autor del artículo: Thalía Ortega
Fecha de publicación: 23 junio 2022
Palabras claves: Café sostenible, Prácticas agrícolas sostenibles, Certificación orgánica, Conservación de ecosistemas, Cambio climático, Huella ambiental, Embalajes biodegradables, Educación al consumidor, Rentabilidad para productores, Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), Alianzas estratégicas, Minimizar emisiones de carbono, Gestión de residuos, Fertilización eficiente, Concientización de marcas y empresas, Costo de producción sostenible
El artículo explora la viabilidad de un futuro sostenible para el café, una de las bebidas más consumidas a nivel mundial, con un impacto significativo en la agricultura y el medio ambiente. Con un consumo global de más de 9 mil millones de kilos anuales, la necesidad de adoptar prácticas agrícolas sostenibles se vuelve imperativa, especialmente ante la crisis ambiental que amenaza la producción cafetalera, que podría disminuir hasta un 50% para 2050.
Nestlé México, a través de su marca Nescafé, está liderando esfuerzos para transformar la producción y comercialización del café mediante su Plan Nescafé. Este plan se centra en la capacitación de caficultores, el suministro de plantas de calidad y la promoción de prácticas agrícolas sostenibles, como el cultivo a la sombra y la diversificación de cultivos. Hasta la fecha, Nestlé ha capacitado a más de 96 mil productores y se ha comprometido a que el 100% del café que adquiere provenga de prácticas sostenibles para 2025.
El artículo también destaca la importancia de involucrar a las nuevas generaciones en la caficultura, asegurando así la continuidad de las tradiciones agrícolas. La historia de Cristal Mellado, una joven caficultora de Veracruz, ejemplifica el impacto positivo del Plan Nescafé en las comunidades cafetaleras, mostrando cómo la educación y el apoyo pueden revitalizar el sector.
En conclusión, destaca que un futuro sostenible para el café es posible a través de la implementación de prácticas agrícolas responsables y el compromiso de la industria, productores y consumidores. Iniciativas como el Plan Nescafé de Nestlé, que capacita a caficultores y promueve la sostenibilidad, son fundamentales para enfrentar los desafíos ambientales que amenazan la producción de café. Al involucrar a las nuevas generaciones y fomentar la educación en la caficultura, se puede asegurar un impacto positivo tanto en el medio ambiente como en las comunidades productoras.
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